Valores

La tríada de Valores que el colegio privilegia son simples, primarios, pero primordiales para entender el “ayer”, situarnos en el “hoy”, pero particularmente, construir el “mañana”. Los valores mas que principios declarativos, son las máximas que todos y cada uno de los integrantes del UNCO, se comprometen a vivir siempre y en todo lugar: Respeto, Fraternidad y Espíritu de Superación.

 

Respeto: Lo entendemos como la valoración de otro como un legítimo otro, igual en dignidad y derechos, pero diferente en pensamientos y miradas. En palabras sencillas, se expresa en “tratar a los otros como esperamos ser tratados”. Tiene varias dimensiones: el respeto a sí mismo, a los otros, al lugar de origen, a las tradiciones, a las normas de convivencia, al colegio, etc.

Se expresa en todos sus integrantes desde las cuestiones más básicas y simples, pero que le dan carácter UNCANO a la vida colegial: el  saludo a todos y en todo lugar como condición para iniciar cualquier trabajo o conversación, la utilización de las llamadas palabras “mágicas”: permiso, por favor, perdón, gracias.

El respeto a las opiniones y opciones diferentes materializadas en la convivencia con esas personas y con esas diferencias particulares. El respeto a los conductos regulares y los canales formales para expresar esas diferencias, también para aceptar aquellas decisiones o resoluciones que no se comparten. El respeto a los lineamientos establecidos, a los acuerdos tomados, a los compromisos contraídos.

El valor del respeto es parte fundamental de la Educación Emocional que promueve el colegio desde la Enseñanza Pre-Básica: estudiantes, educadores, y padres conectados consigo mismo y con los demás, con una gran capacidad de empatía y construcción de acuerdos para actuar en consecuencia: Habilidades sociales para construir, mantener y fomentar ambientes positivos y saludables

 

Fraternidad: La entendemos como la armonía, calidez, acogida, hospitalidad que se cultiva en el compartir con otros, en el convivir. Forma parte del aprendizaje para una mejor convivencia y se expresa en el trabajo de equipo y el desarrollo de habilidades sociales para construir juntos proyectos comunitarios. También es parte de la educación emocional que promueve el colegio en todos sus integrantes.

La fraternidad la entendemos como la búsqueda del bien común y en ese afán, la construcción de vínculos perdurables, de calidad y calidez. Propiciamos que las personas se conozcan, interactúen, tengan experiencias memorables y en ese proceso vayan desarrollando competencias de colaboración y cooperación, para constituir equipos de trabajo que florezcan y hagan florecer a sus integrantes.

La fraternidad aspiramos que se viva en los grupos-curso, al interior del equipo docente, entre los  padres-apoderados, entre toda la comunidad colegial. El tronco que une y amalgama es el PEI: su lema, sus pilares, su misión-visión, sus símbolos.

 

Espíritu de Superación: Lo entendemos como la voluntad por convertirse en actor y protagonista de la propia vida, el compromiso por diseñar proyectos de vida ambiciosos, orientados a metas que generen sentido. Es creatividad para ofrecer soluciones a los problemas que se enfrentan y optimismo para visualizar oportunidades.

El espíritu de superación es la firme convicción que el estado de las cosas siempre puede ser modificado si modificamos nuestras acciones, las que nos convierten en protagonistas y no sólo en meros espectadores, comentaristas o analistas. Esta actuación para modificar la situación la definimos como el acto de emprender, tomar iniciativas, correr riesgos y atreverse a cambiar el curso de acción. Al hacerlo  no sólo modificamos el exterior, cambiamos también la profundidad de nuestro ser, nos transformamos a nosotros mismos.

La voluntad de poder tal como lo expresara Nietzsche, la definimos como el acto consciente de querer que las cosas sucedan y así efectivamente ocurren. Es el dominio que cada ser humano adquiere sobre sus decisiones y actos para convertir en realidad aquello que en algún momento existió sólo en la imaginación.

El espíritu de superación es un acto de vencimiento personal de tipo superior. No es una competencia con los otros, sino consigo mismo. Es la superación de las propias limitaciones y concepciones, de los propios paradigmas, muchas veces inhabilitantes.